Las redes han dado riendas sueltas a que cualquiera cree sentirse en el derecho de alagar u ofender a quien sea, nunca estuvieron más cercanos los presidentes de los representados, los científicos del ignorante, el letrado del analfabeto, el decente del irrespetuoso.
Todos los días vemos personajes que van a las redes a compartir sus versículos como si estuvieran en una iglesia o a alguien le interesa, los cuasi fascistas que vierten su odio racial o sexual cuan vaso derramado, quienes creen saberlo todo y opinan según lo ven en TV, los que no son capaces de crear una oración o frase y los que mientan pasajes históricos, religiosos, científicos o literarios como lo profesionales que son… como un salcocho, las redes se debilitan cuando conviven todos.
La madurez ahora no solo se plantea en las relaciones personales que haces, en como vistes o tu compartamiento humano sino que las redes desnudan los extremos pues al entrar puedes agredir sin saberlo, amar sabiendo o ser agredido como el más despreciado.
Escoger en cual red estar, que temas debatir, cómo, con quien, pasa a ser el nuevo estadío donde el ser humano moderno se diferenciará de sus no-iguales pues es imposible que los no compatibles coincidan en algo.
En este contexto, discutir con quien no está a la altura, no vale la pena… para quien decide ir por la vida sumando voluntades, vivir en buena vibra, con humor, con buen ánimo, pasa a ser incompatible con quienes del sol solo ven las manchas, el vaso medio vacío, quienes no son capaces de sumar un centímetro de voluntad por el bien del prójimo y terminan intentado ofender a quien se esmera.
No vale la pena gastar minutos en explicaciones, contestar excesos de irrespetuosos, de chismosos de oficio, aburridos de la vida que usan las redes para descargar sus frustraciones personales contra los que participan en paz ante la incapacidad de los administradores de las redes de aplicar correctivos ante las escorias humanas ahora con las redes abiertas al odio desmedido y sin control.
Queda de cada uno, como todo en la vida, salvarse a si mismo, buscar sus espacios como si buscaras donde ir a bailar o comer, depende de cada ser humano encontrarse en las redes con sus iguales o al menos, cercanos, alejándose de quien simplemente no tiene la capacidad de entender a veces una frase y trata de disparar las balas que no deben nunca herir pues, como en el mundo animal, cada quien debe vivir su vida a sabiendas que Aguilas No Cazan Moscas pues estas ni llegan a ser candidatas a bocado.