En una reunión con dirigentes medios del Partido Revolucionario Moderno (PRM), la senadora Faride Raful lanzó una advertencia clara: «Aquí hay un solo candidato a senador». Esta declaración enfática reveló la conciencia que tiene la política sobre los movimientos conspiradores que se están gestando dentro de su propio partido en el municipio.
Sin embargo, resultó curioso que en esa reunión no estuvieran presentes los «coordinadores» del presidente, considerando que Faride Raful es una de las figuras más importantes de la campaña de Luis Abinader en el país en este momento.
Dentro del PRM, desde hace algún tiempo se han organizado grupos que, luego de atentar contra el ex-alcalde, ahora tienen en la mira al senador y a algunos de los candidatos a diputados del partido gobernante.
Antonio, un actor «importado» en el partido, ha enfrentado obstáculos en su intento de integrarse completamente en la estructura partidaria. Sin embargo, se ha encontrado con resistencias que han alcanzado límites inadmisibles. En lugar de colaborar para lograr un buen resultado en las elecciones, algunos incluso conspiran en su contra.
Faride Raful, quien comparte escaño en el Senado con Antonio, reconoce la importancia crucial de este último en los planes del presidente para impulsar legislación y resoluciones necesarias para un cambio de rumbo en el país. Por lo tanto, su intervención busca poner orden en el partido y contener a aquellos que, por resentimiento o mezquindad, están dispuestos a sabotear los esfuerzos de su propio partido político.