SAN LUIS. El procurador general de la República, Jean Rodríguez, dejó este miércoles iniciados los trabajos de construcción de la cárcel preventiva de San Luis, obra que forma parte del Plan de Humanización del Sistema Penitenciario Nacional, que ejecuta la Procuraduría General de la República.
Rodríguez explicó el impacto social, humano y de prevención del delito que tiene el plan que puso recientemente en ejecución y que incluye la construcción totalmente nueva de esta cárcel preventiva de San Luis, la cual, a su entender, representaba la expresión más aberrante contra la dignidad de las personas.
“Con el Plan de Humanización del Sistema Penitenciario, hemos venido a cambiar la realidad penitenciaria, que todos conocemos, por otra reformada, actualizada y moderna, basada en la dignidad de cada reo y orientada a su rehabilitación y reinserción”, dijo Rodríguez.
Manifestó que por eso trabaja en la actualización y fortalecimiento de los protocolos del nuevo modelo penitenciario para que la salud física y mental, junto a la formación básica, profesional, técnica y espiritual sean los pilares del sistema carcelario.
El máximo representante del Ministerio Público resaltó que con la construcción de más de 12,000 nuevos espacios, la remodelación de todos los recintos de niños, niñas y adolescentes, la intervención de 12 cárceles preventivas y de los 41 recintos penitenciarios existentes a nivel nacional, dará al traste con el hacinamiento y la sobrepoblación existentes.
En su discurso, Jean Rodríguez sostuvo que la prisión es necesaria para aquellos que han decidido romper con el pacto social, desobedecer las normas y dañar a otros. “El que comete un crimen debe pagarlo y para eso trabajamos. Los hombres de bien deben estar libres, seguros, tranquilos y los criminales deben estar fuera de las calles, deben estar en prisión”, expresó.
En tal sentido, resaltó que la prisión también debe tener un propósito que vaya más allá de la sanción y el castigo, propósito que está consagrado en la Constitución, la que establece que las penas privativas de libertad deben estar encaminadas a la rehabilitación y reinserción social de los presos, por lo que dijo que con este plan se están creando por primera vez y para siempre las condiciones necesarias para ello.
Dijo que, con una capacidad para 236 internos preventivos, el nuevo recinto de San Luis será un centro moderno, de dos edificios, uno para albergar a los internos y otro para alojar oficinas administrativas, y será el primer centro con celdas especiales para recibir internos convalecientes o que tengan alguna discapacidad.
UN APUNTE
Capacidad
La obra tendrá una capacidad para alojar 236 internos preventivos. Será un centro moderno, con dos edificios, uno para los presos y otro para oficinas administrativas, y será el primero con celdas especiales para convalecientes.