Apoderarse de sus estructuras para que le sirvan como escalera a un proyecto de presidente del PRM en SDE y luego, presidente de la República.
El fraude de las primarias del 1ro de octubre no solo pretendía que Manuel no se reeligiera sino también que Adán continuara con su poder local.
Muchos perremeístas se dejaron llevar por la campaña comenzada por Adán contra Manuel, acusándolo de no ser un «verdadero perremeísta», pero su guion y campaña dieron paso precisamente a quien no tenía arraigo con el partido, ni con él, pues Manuel desde antes del 2016 se había hecho acompañar por un segmento importante del PRM, pero Dioris, no.
Algunos funcionarios del Gobierno accionaron unidos en un plan macabro junto a lo peor de la delincuencia electoral y con la venia de segmentos del organismo fiscalizador, colocaron al cuarto lugar en el primero, dando paso a una de las mayores vergüenzas que cambiaron para siempre al PRM y a la ciudad.
Dioris comenzó el ruido contra su principal adversario y a quien envidia con profundidad, Manuel Jiménez, y desde el día 25 de Abril, su primer día, comienza mintiendo sobre el estado de las flotillas de los camiones nuevos y creando un show de «guerra contra la basura» en un municipio que se le entregaba limpio y organizado.
Esperó, entre ruido y ruido y mentira tras mentira el fin de la campaña y ha comenzado, junto a Jesús Colón, Secretario General, una cacería, primero, de todos los que se «sintieron bien con Manuel» pero luego con todos los que tienen cierto peso en el partido, lo cual desnuda un plan real de socavar la organización política y asaltarla con el presupuesto municipal.
Dioris va a por el partido, va a por el liderazgo histórico que bueno, malo o regular, se han ganado los espacios, para, cercenando el camino de los que están y con los «nombramientos» a su favor, ir colocando en puestos claves personas que él pueda manejar, en pos de cuando lleguen las internas hacerse de las estructuras y que estas le sirvan luego para su proyecto presidencial… la Alcaldía, para él, es solo el escalón.
Se cancelan a dirigentes importantes en las zonas, pero pacta con las alas más perversas y oportunistas dentro del partido y a esos sí, les da un espacio, pero en detrimento de las grandes mayorías, lo cual puede comprobarse al hacer el mapa de cada persona que coloca y a quién obedece.
Anselmo, seguro, pactó con lo peor del partido y el plan que se aprecia por la ola de cancelaciones es cercenar las dirigencias históricas que no le sean afines a sus intereses, independientes o de otros equipos y a los cuadros que pueden mañana, fortalecidos, hacerle frente a las pretensiones de hacerse con las estructuras.
El no conocimiento del partido a lo interno, sus propias contradicciones y aliarse a lo peor de esa organización, que encuentran ahora, de forma oportunista, la forma de tener más poder, demuestra que el plan de primarias para buscar el candidato y luego, el asalto, fue planificado por muchos que ahora son las primeras víctimas, usados por sectores que ellos nunca comprendieron, vendiendo que el «peledeísta» y enemigo del partido era Manuel cuando en realidad, era Dioris Anselmo Astacio, conocido mercadológicamente como Dio.