Quien no se lleva de consejos, no llega a viejo.
La política no es para los buenos administradores, ni para dueños de casas de apuestas, ni para los pastores, ni para los cantaautores, ni para maestros, la política es para políticos, se lleva en el corazón y para practicarla, se necesita el ABC.
La política requiere tiempo, requiere equipos que tengan en cuenta estructuras, la pirámide de lealtad, de conocerse mutuamente cada uno de los entes que participan, fabricar hermandad…. en política el dinero no manda… a quien se le puede decir, por enésima vez.
Amen de lo sucedido el Día D del año 2016, la realidad es que el Cañero «llego» a donde llegó pues había, durante mucho tiempo, creado su propia estructura, no prestada, suya, asumiendo compromisos personales y salvo algunos que se van y otros que llegan, su anillo sabia donde quería llegar.
El Cañero, para llegar, se mostró humilde, visitó casas, tomó café, incluso, durmió en algunas de estas de ellas cuando la madrugada lo tumbaba… el Cañero supo labrar su camino, hasta llegar a su meta, hizo los pactos que tenia que hacer y prometió lo que no podría incluso, prometer.
Se creo un equipo Swat, ante tanta «esperanza» y le llegaron asesores estrellas que decidieron: Llevarlos Al Podium sea como Sea… y así ocurrió, pero no todos saben estar… Alfredo creyó al parecer en la eternidad… dejó de cumplir los compromisos y los mismos que lo subieron… lo bajaron…. pero al menos, llegó.
Luis Alberto hace todo lo posible por no llegar. Con un carácter afable, logra imponer su sonrisa al inicio forzada, ahora, relajada, ante tantas muestras de esperanza que, no son suficientes.
Tal parece que cada acción está creada para entorpecer sus pasos al poder.
Han, desde no seleccionado bien quien maneje el audio de sus actividades, hasta despreciar estructuras enteras y sobre todo, personas que han dejado la suela por llevarlo al podium sin que a ciencias ciertas uno pueda encontrar cuáles son las causas que llevan a no hacer lo que en política, hay que hacer, lo que hizo el Cañero, así de simple.
Aflora el conflicto con los precandidatos que lo llevaron desde la Circunscripción # 3 pero eso es solo lo que se ve del iceberg, hoy, incluso hoy, ese equipo no ha sabido poseer una estrategia a lo interno del PLD y se salva, para suerte, que desde arriba, ante la imposibilidad de llevar a Karen y el tranque con el candidato presidencial, y dada la coyuntura igualmente difícil con Cristina, los morados busquen por todos los medios la forma de «ayudar» a su candidato.
Aun con todo, hoy, el temor, es que si antes de llegar no han tenido la sapiencia, incluso, la maldad de manipular aunque sea engañando a sus compañeros para llegar sino, temprano, enseñar las uñas, que podría esperar esa estructura peledeista a quien el Cañero estando arriba no tuvo en cuenta, de Luis Alberto si este desde ya los ha «afueriado«.
Hoy el peledeista tiene miedo pues antaño Juancito secuestró el partido, hoy se vislumbra que llega su sucesor pero claramente,, sin que se sepa quien manda en ese equipo, no posee las luces de el fallecido dirigente de Santo Domingo Este.
Los equipos del PLD dicen que el de Luis Alberto «bloquea» a quien trata de ayudarlo y esto es más allá de las poses en actos, sin contar con el error sin sentido y sin fronteras de haber seleccionado a una pastora que no representa a los evangélicos para ser su vice.
Puede que gane, si, claro, posee carisma, no todo es negativo, Luis Alberto se logra vender como lo que es, un hombre noble, pero esto no es nada parecido a lo que necesita una masa que quiere que te voten, necesita respeto y ese equipo, no ha sabido ni crearlo para si y mucho menos respetar a los que llevan 30 años llenando de gloria al partido de Juan Bosch.
¿Están a tiempo?. Eso nadie hoy lo puede predecir, con un expeledeista que mantiene sus entrañas entre sus antiguos compañeros, una mujer que se roba algunos cientos de votos y un Leonel que coloca su pieza para jugar a que se sumen a él, y hacer lo que se tenga que hacer para sacar a los morados de ahí.
Luis Alberto debe urgente no tomar a Juancito como paradigma de cómo llegar y cómo quedarse pues esos tiempos pasaron, ahora manda una ley de partidos, el voto preferencia, un sálvese quien pueda, un dame lo mio como nunca antes y es imposible apelar al sentimiento de ser el autoproclamado heredero del ex-alcalde, son tiempos de cambios, donde el votante podrá «picar» el voto para colocar su sentimiento en quien le ha dado una mano y para colmos, el PLD debilitado.
Cuesta mucho escribir sobre el tema recurrente, incluso, apenado por tanta torpeza, buscamos no ser ni buenos ni malos, no escribir ni a favor ni en contra, pero hay que escribir, y quien no quiere ruidos, que no cargue guanos.
Luis Alberto debe urgente, buscar a El Cañero para que le cuente su historia de éxito y fracaso aunque se ha dicho tanto, y se ha escuchado tan poco que hasta esto podría ser un esfuerzo inútil de quien luce no quiere escuchar a nadie.