Podría parecer muy altanero querer ser del Comité Político del PLD por encima de figuras históricas que ya lo intentaron, como Alfredo Martínez y Ramón Cabrera, a quienes les cerraron el paso en la pasada convención, haciendo emerger a un político con 0 incidencia en una ciudad de más de un millón de habitantes y dejando a quien, si bien tuvo logros en el pasado, su desgaste le regaló dos derrotas consecutivas.
En el caso de Luis Alberto, si bien aún, incluso en la ciudad, no es una figura que logre agrupar a todo el PLD, logró desbancar a algunos históricos en las internas pasadas y alzarse otra vez, por consenso, con una candidatura que perdió, a diferencia de las pasadas del 2020, por un proceso condenado al olvido para tapar irregularidades innombrables, amén de la apatía de la población y de, posiblemente, estrategias efectivas en la movilización el día de las elecciones. Además, la distorsión y el entretenimiento de la no alianza en este territorio, por diferentes razones.
El PLD en el municipio necesita de alguien que conozca y esté relacionado con las nuevas generaciones de peledeístas para, incluso con ello, tratar de lograr que el debilitamiento no continúe, y además, teniendo en cuenta que el cambio «generacional» de los que «son de aquí» en el CP actual, no ha tenido incidencia alguna en el territorio.
Luis Alberto ha sido la persona confiable para candidatos y líderes del Comité Político actual, y seguro es la figura más conocida que, con estrategias adecuadas —cosa que no le ha acompañado necesariamente en el pasado—, logre atajar el debilitamiento del partido e incluso lograr una recuperación más o menos paulatina.
No tener una voz en las más altas instancias del partido condena al Comité Político nuevo a no estar bien informado, de primera mano, sobre la actualidad en el territorio, político, social y económico.
Por ahora, la ciudad se queja no solo del PLD, sino de todos, pues está en un período de abandono y deterioro frente a la vista pasiva de todos, necesitada de una oposición que sepa qué hay que hacer y sacar a los actores políticos de la apatía e incluso el servilismo al poder reinante, que es lo que hoy se aprecia.
Si el PLD realmente piensa en una necesaria renovación, y quiere en el futuro tener incidencia en la ciudad, es seguro que debería tener en cuenta la opción del dos veces candidato a alcalde y exdiputado Luis Alberto para el Comité Político, si realmente posee intenciones como organización política y quiere romper el muro de las castas históricas, hoy señaladas como responsables de los bajos resultados de la pasada contienda electoral.
