El siguiente es un artículo de opinión
Dio Astacio, empresario, emergió a la política en las pasadas elecciones, usando la estructura del PQDC, partido con un importante componente religioso mayoritariamente evangélico y sobre esa plataforma se dio a conocer.
Acuñando el «pastor» delante del nombre logró atraer, lógico, al electorado que profesa esa rama de la religion cristiana.
Mientras, Manuel Jiménez apostaba a que «Juancito» se iría a reemplazar a Cristina Lizardo y todo se complicó, cuando el Comité político «ordenó» al alcalde recular hasta su posición anterior, produciendo inmediatamente el enfrentamiento democrático si, pero muy accidentado, entre Manuel y el El.
El CP del PLD es el verdadero poder no solo del partido sino del país, por lo que la orden de que Cristina se queda era igual a «Manuel debes retroceder a diputado», pero este no obedeció, terminó, tal vez a destiempo, renunciando del PLD donde era «muy popular» para dividir su nicho…yendo más al centro del electorado y tomando de todos.
Mientras Manuel Jiménez se le conocía sobre como cantaautor y los que están más cerca del poder por la Ley de Cine, a Dio se le dio a conocer porque inundó cada muro de la ciudad con posters de su cara, una actitud agresiva pero mercadologicamente correcta pues, de la nada, saltó al escenario.
A todos llama la atención que Dio, desde los inicios, en vez de enfrentar al poder hegemónico del PLD que, para colmos, gobierna, se centrara en enfrentar a Manuel… y es que los números, ni a Dio ni a nadie engañan, con ellos uno selecciona de dónde es que puede sumar votos.
En campaña, ni Dio ni Manuel aceptaron tener «estrategas», eran ellos mismos son y en el caso especifico de Astacio, ese es uno de sus «empleos».
Ambos trataron infructuosamente de construir sus propias movimientos dando al traste con la partidocracia, Dio resuelve entrar al PRM aun no siendo perremeista en su ideología, pero a sabiendas que ese partido posee estructuras, precarias aun, que necesitan organizarse, pero estructuras al fin, mientras que Manuel ya ha sido proclamado por el Frente Amplio en lo que augura hacer parecer el proceso al pasado 2016, con la clave en las alianzas.
Hoy, como ayer, mientras Manuel selecciona al que esté en el PLD, gobernando la alcaldía, como su adversario, Dio se apresta a adversar a este tratando de conquistar al electorado perremeista que, sobrepasando el 50% apuestan al cantaautor expeledeista aun estando fuera y esto no solo es un problema para Dio sino también para Adan Peguero, que también aspira.
El militante perremeista cada día entiende que el deber no es que el alcalde sea del partido, sino que sea de ellos. El poder no lo da las siglas, el poder lo da el alcalde. Si es mio, no importa de que partido sea.
Falta aun por ver, sin embargo, hasta hoy, está claro que de Dio tiene como sus frentes consquistar el PRM a lo interno, pase lo que pase y cuente lo que cueste evitando así que Manuel incluso se inscriba o pacte.
Dio, a diferencia de Manuel, es mercadólogo y sabe perfectamente como modificar discursos en pos de conquistar un electorado especifico, usa métodos científicos y ahí podremos esperar que como en el 2016 veamos ataques contra Manuel en vez de contra El Cañero, Dio sabe lo que hace… uno a la vez… uno a la vez.
Ambos, Dio y Manuel tienen una característica que los une: ambos siempre creen tener la razón y eso, a ambos, les perjudica.