No aplaudieron a Dio Astacio en la «Batalla de la Fe»

¿Asistió como funcionario o como «pastor»?

Una foto de archivo muestra al pastor Ezequiel Molina, junto a Wessin Chávez, presidente del PQDC y evangélico, dando un espaldarazo a Dioris Anselmo Astacio, conocido mercadologicamente como «Dio», mote que construyó para participar en política.

En las elecciones del 2016 el impulso del pastor era evidente y en aquella ocasión, con fraude y todo, se le «asignó el 4to lugar» arrastrando varios regidores.

Justo después del certamen electoral se destruye el pacto con el PQDC y vuelve a intentar la candidatura para el 2020.

Se sabe que en ese retorno, muchos de los pastores que le creyeron y apoyaron en el 2016 ya no lo hacían, aunque el apoyo evangélico nunca ha sido quien ponga alcaldes y otros cargos electivos pues, aún, los pastores no mandan en las decisiones de las ovejas… el «fenómeno brasileño», aún en RD dista mucho de ocurrir.

En esa ocasión prometió haber inscrito 35 mil nuevos miembros al PRM a través de la plataforma nombrada Premil II pero el día de las elecciones aparecieron solo 7 mil, perdiendo las primarias de forma aplastante contra Manuel Jiménez que le superó al doble.

Para las primarias del 2024, aseguró en entrevista del programa Informe TV, que tenía, de manos de pastores, 100 mil votos, pero incluso, los que le asignaron en el fraude, no llegó ni a un tercio de esa cifra.

Dio fue «decretado» por el presidente desde el mismo año 2020 como «Enlace con las Iglesias», cargo que posiblemente le hiciera al final, más daño que producir beneficios pues, «cumplir» con todas las «casas de Dios», siendo estás tan «diáspora» e incluso, cada una de ellas y los concilios «pelear» por sus intereses, hace que sea muy difícil ser interlocutor válido y justo; prueba de ello es el reparto de los galones de pintura que le asignó el PROPEEP y que fueron «desnudados» en una denuncia de Alicia Ortega, sin saber a ciencias ciertas la lista de instituciones que el «pastor» favoreció en su momento y claro, no poderlas, en teoría, asignar solo a Santo Domingo Este dónde ahora, es candidato, sino que era para todo el país y en República Dominicana hay cientos de iglesias.

Dioris (Dio), llega a la Batalla de la Fe ya sin ser uno de los «fuertes» entre los cristianos, que muchos dudan que sea aún pastor pues quiso con fuerza, venderse como algo que tampoco es, Gerente, lo cual ha generado demasiada duda sobre su estatus incluso, como líder evangélico hoy día.

Se publicó una foto donde se ven, la Vice Presidente y al Senador de la Provincia acompañando al candidato a alcalde por el PRM en Santo Domingo Este pero, en el momento que le nombraron, nadie aplaudió, curioso porque se entiende él es de ahí, que es su nicho, su escenario, su ambiente, y no es así.

Surgen algunas dudas adicionales sobre su participación pues se entendía que él había renunciado al cargo en «palacio» y por esto lo nombró Ezequiel, no como candidato, pero hay «denuncias» que él renunció al decreto del cuál no era remunerado, quedándose con el otro pago, y que maneja recursos.

Aún con estos datos no del todo comprobados y organizados, queda la duda del por qué un candidato sigue en el tren gubernamental en medio de su campaña y las implicaciones, incluso éticas, para un gobierno que prometió cambios.

El ex-pastor o pastor, no se sabe con claridad, pero si candidato oficial del PRM, ha sido muy criticado porque los bonos cayeron de a 1 por pastor para estás navidades, dejando a las ovejas esperando, lo cual, para colmos, no garantiza adhesión y menos, convencer el voto.

Otro de los tópicos que los que estaban allí se preguntan, es si el «pastor» estaba hasta el fin del evento pues, a los pastores les está vetado el irse hasta que no se cierra el telón, pero por la historia como lo que ocurrió en el debate del Coral Mall en la campaña interna y en el evento con el movimiento CRECE en el ITSC, es casi costumbre del candidato no esperar a que nadie hable, se retira del lugar.

Muchos candidatos creyeron que ir a la Batalla de la FE este año les daría un voto, pero el pastor Ezequiel Molina los dejó «con el moño hecho» y algunos decidieron irse como siempre hacen cuando no son los protagonistas.

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