El Metro de Santo Domingo debía llegar desde Los Alcarrizos hasta San Luis.
Ni Leonel Fernández, ni Danilo Medina, ni ahora, Luis Abinader, en la figura de sus «expertos», presentaron nunca los estudios que señalen las justificaciones para cada tramo del Metro.
El equipo de Leonel Fernández buscó la forma de «terminar» el primer tramo desde «La Bolita» hasta Santo Domingo Norte para convencer la viabilidad del proyecto, siempre sin presentar la factibilidad del proyecto a la opinión pública, se aprobó casi grado a grado según los «deseos» o conveniencia del presidente.
Llegando Danilo Medina, en un evidente ejercicio de mezquindad, detuvo el tramo hasta, al menos, Mega Centro, en Santo Domingo Este y priorizó su propio «legado», el Teleférico, que casi fracasa justo a semanas de haberse inaugurado. Solo después de terminado el proyecto, a duras penas, se continuó el metro en tramos esperados, gastando muchos millones en un puente «exclusivo» para el metro, pudiéndose aprovechar para otros menesteres, incluso, otro carril de automóviles.
La llegada de Luis Abinader plantea otro tipo de retos, pues este, al menos en teoría, desechó los supuestos estudios de los primeros años para «inventar» sus propios tramos.
El actual presidente promete llevar el metro al sur de la «San Vicente de Paúl», para conectar justo el virtual «centro de la ciudad» de Santo Domingo Este, cruce de la carretera Mella, hasta zonas de La Isabelita, en el Parque Del Este, que si bien es una zona de mucha población, es posible que no se compare con la que existe en dirección San Luis.
Uno a los puntos importantes es el llamado 9, justo en la Charles de Gaulle con Carretera Mella, que empata la ciudad con el movimiento poblacional desde Villa Mella hasta toda la Circunscripción 3 de Santo Domingo Este y desde la San Vicente de Paul, donde está precisamente la estación del metro.
Es claro que todo ha cambiado en los últimos años.
Ciudad Juan Bosch y otros grandes territorios poblacionales alrededor de la Avenida San Isidro, la Avenida Ecológica y demás, hacen pensar que no solo por la Carretera Mella y sus barrios El Almirante, Villa Liberación, todos sus alrededores y el propio San Luis, habrá mucha población asentada y asentándose, por lo que los planes de movimientos de población pues, el tipo de transporte debe ser decidido según el cúmulo de personas por kilómetro cuadrado.
¿Cuáles son los planes del presidente actual, realmente?. ¿Por qué el metro de Santo Domingo se «inventa» hacia el sur y no «dobló» hasta el este de la ciudad como se planificó?, por qué nadie sabe, ni supo nunca, qué justificación tienen los gobiernos para decidir qué construir y por qué?.
¿Por qué el presidente cambia el proyecto original, hubo cambios en la cantidad de población en todos estos años?
El «cambio» debe ser igual, orientado a orientar, aun cuando el presidencialismo permita que «no se informe» a nadie de las justificaciones de las decisiones presidenciales.
Ya es hora.