Es dificil para muchos entender cómo piensa el poder
Las redes se visualizan «sugerencias» al nuevo presidente de que debe colocar a una persona en un cargo u otro, cantan, hacen coro: «por que es un gran compañero, porque es un gran compañero»… sin embargo, esos «ruidos» los presidente no los tienen nunca en cuenta.
Las forma de ser vistos es en el tiempo y demostrando capacidad y sobre todo, lealtad, pues los puestos requieren ser «provechosos» para los planes netamente políticos que solo los sabe, en este caso, el presidente de la República.
Todo el que tenga capacidad pero no demuestre o no pudiere demoestrar lealtad, podria eventualmente siendo puesto en un lugar, pero no en el lugar deseado.
Las campañas por las redes son consideradas presión y llaman inmediatamente a sospechas de que el anciado puesto seria mal aprovechado pues, quien levanta la mano y exige quiere salirse con la suya, no cumplir con, en este caso, el presidente.
Eso mismo sucede en las Alcaldías. Las presiones para ser colocados, para conseguir «cosas» o simplemente, para ganar impunidad, comienzan inmediatamente sube un incumbente. Sin embargo, depende del Alcalde, en este caso, ceder a presiones que terminan convirtiendose en chantajes o llamadas «campañitas».
Cuando no sale como se tenia planificado, las fuerzas vivas, incluso, otrora aliadas, comienzan a cerrar filas y buscar entre ellos líderes para «tumbar el pulso» al incumbente, probando planes, seleccionando personal y apuntando a objetivos a corto, mediano, y largo plazo.
Los funcionarios seleccionados por los incumbentes tieden, además, a creer que se han ganado un puesto y muchas veces terminan desafiando al poder y haciendo de su responsabilidad un coto de caza donde hacer, deshacer, tomar desiciones e incluso, enriqueserce.
El ejercicio del poder es complejo, pero no menos dificil es mantener la calma si el poder te abraza, toca tu puerta y tienes que lidear con él.
Lo único que salva a un presidente, a un alcalde, a un funcionario, es el cumplimiento de la Ley.
