Sobeida vs Hidalgo… dos precandidaturas enfrentadas

…o Hidalgo vs Sobeida, el orden, da igual…

Las redes de Santo Domingo Este tienen días en que amanecen llenas de confrontaciones entre los equipos que se adversan, aupados por algún que otro candidato a alcalde que, todos ellos, creen que la forma de sumar es atacando.

Desde que Sobeida, precandidata a diputada, en un viraje frutal dejó en la calle a sus regidores, los seguidores de ellos, que no son pocos, e incluso tienen plataformas estructuras, comenzaron a dar a conocer detalles de la decisión, evidentemente desacertada por la forma, no por el fondo, tal vez.

Las redes comentan, desde presiones sin igual de los Cañeristas porque esos regidores juraron con Luis Alberto, su contrario, hasta que Sobeida tuvo otras razones para dejarlos atrás.

La realidad es que este hecho más el ataque despiadado de los hoy AntiSobeida, han perjudicado con creces su camino… que estaba viento en popa.

Sobeida era parte del equipo de Hidalgo, diputado, precandidato a continuar en el cargo, equipo que «también» abandonó y estos, sin perder tiempo, se pusieron a terminar de aplastarla. No se sabe quien comenzó, pero en las redes traen «recuerdos» del por que el Hidalgo perdió el favor del presidente… ( o al revez, da igual ) en forma de video y de imagen.

Hoy hay confrontación en dos equipos de diputados que fueron aliados antes, y equipos de redes de los anteriores «amigos» de Sobeida por el abandono de última hora.

Cada equipo asegura tener el nicho de los maestros y es claro, que lo comparten, al final, nadie es dueño absoluto de un nicho de votos.

Se sabe que Sobeida apresuradamente esta «tirándole» por WhasApp a sus antiguos compañeros y a sus coordinadores, mientras del otro lado tiene a los «Hidalguistas» ripostando un ataque que, a ciencias ciertas, nadie sabe quien lo inicio.

Cada quien, casi, ya sabe por quien va a votar, es muy difícil que en el medio del camino se abandone un equipo, pero en política, y con dinero de avanzadas y para gastar e incluso amenazas personales, todo puede pasar.