
El alcalde de Santo Domingo Este, Dioris Astacio, enfrenta una crítica contundente por parte de Plinio Llaverías, quien en un mensaje cargado de indignación lo acusa de irresponsable por no cumplir con el pago de las prestaciones laborales a los servidores públicos desvinculados durante su gestión. Este señalamiento no solo pone en tela de juicio la integridad del alcalde, sino que expone una contradicción entre sus promesas y sus acciones, dejando a cientos de exempleados en un limbo económico y a la ciudad al borde de un creciente malestar social.
Una Promesa Incumplida
Llaverías no escatima en palabras al exigir que Astacio cumpla con la ley y salde las deudas laborales de los trabajadores cancelados, muchos de ellos militantes del Partido Revolucionario Moderno (PRM), el mismo al que pertenece el alcalde. La crítica resalta una promesa pública del propio Astacio de hacer frente a estas obligaciones, un compromiso que, según Llaverías, ha sido traicionado al instar a los afectados a buscar justicia en los tribunales. Esta actitud no solo refleja una falta de humanidad, como señala el texto, sino que también pone en riesgo la cohesión del partido, al alienar a sus propios simpatizantes con una postura que parece más evasiva que resolutiva.
Despilfarro Frente a la Necesidad
El reproche de Llaverías va más allá del incumplimiento y apunta a una gestión que prioriza gastos superfluos sobre las necesidades básicas de los ciudadanos. Mientras los desvinculados esperan lo que por derecho les corresponde, Astacio ha destinado millonarias sumas del presupuesto municipal a iniciativas como la compra de cachuchas y franelas para promover un nuevo nombre para el municipio, una acción que Llaverías califica de innecesaria y despilfarradora. Este cambio de nombre, además, carece de sustento legal sin la aprobación del Congreso, lo que agrava la percepción de una administración desconectada de sus responsabilidades prioritarias. El contraste es evidente: recursos que podrían aliviar la situación de los exempleados se diluyen en proyectos de dudosa utilidad.
Un Clima de Descontento en Crecimiento
La indiferencia hacia los servidores públicos cancelados no es un problema aislado, advierte Llaverías. El desprecio mostrado por Astacio está sembrando un clima de descontento que amenaza con traducirse en protestas a nivel municipal. Los afectados, abandonados a su suerte tras años de servicio, no solo enfrentan dificultades económicas, sino también la frustración de ver cómo sus derechos son ignorados por un alcalde que se presentó como gestor eficiente. Este malestar, según el texto, podría escalar y afectar no solo la imagen de la alcaldía, sino también la estabilidad política del PRM en la zona.
Un Llamado a la Responsabilidad
El mensaje de Llaverías cierra con un emplazamiento claro: Astacio debe actuar con responsabilidad y transparencia. Priorizar el bienestar de los ciudadanos y cumplir con las obligaciones legales no es una opción, sino un deber ineludible. La crítica no solo pone el foco en el incumplimiento de una promesa específica, sino en un patrón de conducta que favorece la imagen sobre la sustancia, el derroche sobre la justicia. «Usted es un irresponsable» no es solo un título; es el eco de una ciudadanía que exige que las palabras se traduzcan en hechos.
En un momento en que Santo Domingo Este enfrenta retos urgentes, la gestión de Astacio está bajo escrutinio. Si el alcalde no rectifica su rumbo y honra las prestaciones adeudadas, el descontento que señala Llaverías podría convertirse en una ola difícil de contener. La pelota está en su tejado: o cumple, o enfrenta las consecuencias de un liderazgo que promete mucho y entrega poco.
creado por Multimedios LZO

